3 años, 3 discos

Normalmente a la hora de escuchar música me suelo poner el aleatorio del ordenador, mp3 o CD recopilatorio de turno. Pero hay discos que merecen ser escuchados de principio a fin, de los que nunca cansan, de los que no necesitas que pase un mes para volver a escucharlo otro mes seguido, todos los días. Refiriendome a los últimos 3 años...podría decir discos que escucho enteros sin más (Corridos de amor de La Pulquería, La ley innata de Extremoduro, Se acabo la paz en Korea de Ultimatum...), pero si tuviese que hablaros de los 3 discos que, literalmente, no he parado de escuchar , desde que los conociese hace menos de 3 años, os hablaría de (que sinsentido, todos sabemos que a continuación voy a hablar de ellos):

1) S Curro - Bipolar (2007)

Empezando de atrás a adelante (refiriendonos al tiempo que llevo escuchandolo). Bipolar es estilo y es el desarrollo del personaje hecho disco: drogas, distorsión mental, amor o no, punk-rap sevillano. Años después: el mismo escalofrío que al escuchar por primera vez "Quiero parar el tiempo" o cuando leí por una amiga la frase que hizo que me bajase el disco:

"La primera vez que el humo entró en mi pulmón,

el primer trago largo de sabor amargo,

polvo en el carné,

polvo sin condón,

polvo...rver a sentir lo que la primera vez"

(La música del universo)

2) Boysetsfire - Tomorrow Come Today (2003)

Hardcore, emocore, post-hardcore...no tengo ni puta idea de clasificar esto, yo le llamaría

"album con fuerza que me hace cantar cada mañana que me lo pongo al levantarme", buenas letras, buena técnica,... Una pena que, para cuando en 2008 alguien me los dio a conocer, el grupo ya se hubiese separado. Miles de recuerdos, hoy por hoy no tengo con quien escuchar este disco cuyo "Handful of redemption" ha sido mi himno y mi sentir.

3) 1000es - De un tiempo a esta parte

Realmente es el que más tiempo he estado escuchando, pero por los conciertos y las versiones anteriormente grabadas. Con el disco me pude hacer en mayo de 2009, cuando el grupo dio su último concierto, dejando un poco huérfanos a muchos amantes de la música. 1000es marcó una época de nuestras vidas, fue calidad, un gran proyecto que murió joven, y cada vez que escucho la última canción del álbum "Ya puedo enloquecer", nos veo a todos dándolo todo de nuevo en cada concierto, y el sabor que me dejó ese último momento, "Qué habré hecho mal", los golpes entre el público, y a los 1000es tocando en calzoncillos, es que no hay otro momento, no hay otro lugar que aquí y ahora. Descansen en paz.